La inteligencia artificial (IA) está presente en muchos aspectos de la vida cotidiana, pero no es bien recibida por todos, según los resultados de una reciente encuesta realizada en Estados Unidos. Casi tres cuartas partes de los estadounidenses tienen reservas sobre el uso de la IA en aplicaciones de alto valor, como vehículos autónomos, acceso a información gubernamental o atención médica. Solamente el 48% cree que la IA es segura y el 78% está preocupado por su uso malintencionado.
El estudio, llevado a cabo por el centro de investigación MITRE y la empresa de investigación de mercado Harris, encontró que el 82% de los encuestados estadounidenses apoya la regulación gubernamental de la IA, algo que es compartido por el 91% de los expertos en tecnología. Sin embargo, solo la mitad de los encuestados dijo sentirse cómodo utilizando tecnología con IA para preguntas médicas de rutina o formularios gubernamentales, y tres cuartas partes están preocupadas por la creación de deepfakes y la introducción de contenido generado por IA en los medios de comunicación.
Los resultados muestran que existe desconfianza hacia la IA en todos los grupos demográficos, pero algunos son más favorables que otros. Los hombres, los demócratas, las generaciones más jóvenes y los estadounidenses afroamericanos/hispanos están más cómodos con el uso de la IA para el procesamiento de información gubernamental, chatbots médicos en línea y vehículos autónomos compartidos. Sin embargo, incluso aquellos que adoptan la IA temprano pueden tener preocupaciones sobre su futuro.
En resumen, la IA aún no goza de la confianza de los estadounidenses debido a sus preocupaciones sobre la seguridad y privacidad. Será necesario esperar más tiempo para ver si esta tendencia continúa y si estos resultados son similares en otros países.
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